Clasificamos las habilidades y cualidades no cognitivas en un conjunto de habilidades sociales y habilidades personales. Están débilmente correlacionadas con la capacidad cognitiva, pero difieren en el aspecto interrelacional.

Las habilidades sociales suelen estar relacionadas con la necesidad de colaborar e interactuar con otras personas. Algunos ejemplos son la comunicación, la inteligencia emocional, la asertividad, el trabajo en equipo, etc.

Las características personales hacen referencia a predisposiciones personales que caracterizan cómo una persona aborda las tareas laborales: resolución de problemas complejos, autogestión, adaptabilidad, responsabilidad, creatividad, etc.

Las habilidades soft en el mundo empresarial altamente competitivo te ayudan a destacar entre los solicitantes de empleo habituales, con habilidades y talentos comunes.

Tener la capacidad de identificar problemas y necesidades y tener diferentes enfoques para la solución de problemas son algunas de las principales habilidades soft que buscan los diseñadores.

Los diseñadores del futuro necesitan habilidades soft para identificar soluciones, pensar y actuar de manera diferente cuando se enfrentan a problemas. Las habilidades sociales también son importantes para sentir empatía y poder desarrollar un diseño centrado en el usuario y para trabajar bien dentro de un equipo.

Permiten que las personas creen y compartan contenido digital, se comuniquen y colaboren, y resuelvan problemas para la autorrealización efectiva y creativa en el aprendizaje, el trabajo y en actividades personales y sociales en general.

Las habilidades digitales iniciales, es decir, las habilidades funcionales básicas necesarias para hacer un uso básico de los dispositivos digitales y las aplicaciones en línea, se consideran ampliamente un componente crítico de un nuevo conjunto de habilidades de alfabetización en la era digital, junto con las habilidades tradicionales de lectura, escritura y aritmética.

El espectro más alto de habilidades digitales permite a los profesionales aprovechar al máximo las tecnologías digitales a través del empoderamiento. Las grandes transformaciones digitales, como la realidad virtual y aumentada, el análisis de big data o la ciberseguridad, requieren nuevas habilidades y, a su vez, impactan en el desarrollo de capacidades y habilidades para la economía digital del siglo XXI.

La industria está inmersa en su transformación digital y el sector del mobiliario no es inmune a esta transformación. Los diseñadores del futuro tienen que adquirir conocimientos y habilidades digitales para desarrollar nuevos productos y diseñar nuevos modelos de negocio que sean competitivos y de vanguardia.

• Las habilidades de sostenibilidad genéricas ayudan a desarrollar la conciencia o implementar actividades eficientes en el uso de recursos, eco-ciudadanía, etc.
• Se requieren habilidades de sostenibilidad específicas para implementar soluciones técnicas para: reducir el consumo de energía, materiales y agua, generar menos desechos / contaminantes, usar sustancias menos peligrosas, implementar esquemas de devolución para reciclaje o reutilización, etc.
• Se requieren habilidades ecológicas altamente especializadas para desarrollar e implementar nuevas tecnologías limpias, eco-materiales avanzados, modelos comerciales circulares complejos, procesos de remanufactura, etc. 

Las habilidades ecológicas son aquellas habilidades necesarias para adaptar productos, servicios y procesos a los requisitos ambientales voluntarios o legislativos. Todos los sectores y todos los niveles de la población activa necesitarán competencias green.

El Pacto Verde Europeo y el nuevo Plan de Acción de Economía Circular de la Comisión Europea acelerarán la transición de la industria hacia una economía más circular. Sin duda, el futuro de las empresas será más "digital", pero también más "verde". El diseñador del futuro debe tener estas habilidades “de sostenibilidad” para asegurar que sus nuevos productos, desarrollos y modelos de negocio incorporen atributos de Economía Circular.